lunes, 30 de noviembre de 2015

Miguel Bosé

No pensaba escribir hasta después del 4 de diciembre, porque ese día terminan mis pruebas y ahora no tengo tiempo de nada. Básicamente, voy al baño, como y estudio al mismo tiempo, sueño con la materia y hace unos días tuve una pesadilla donde alguien se robaba mis textos de Políticas Públicas y desperté llorando... A ese nivel ha llegado mi trauma... Norma, me cagaste la vida...

Hoy no fui a clases para poder alcanzar a leer un texto para un control de mañana que tiene como mil páginas y otra vez quiero llorar... En fin, hoy desperté temprano, me preparé el desayuno y prendí la tele para que me hiciera compañía. Debo decir que en mi casa ven el Mega: noticiero matutino, teleseries, y, cuando yo estoy en la casa, el matinal. Sí, veo el matinal con Lucho Jara y la Karen Paola. Será porque a veces no encuentro el control y me da una soberana paja buscarlo y, como ya estoy sentada a la mesa, no pienso moverme. Además, el doctor chino que aparece a veces tiene unas recetas muy buenas para los males. El matinal del TVN no me gusta, el Copano me saca de quicio, el de CHV es como una mezcla de Primer Plano, Maldita Moda, SQP y todas esas mierdas juntas, pero tomando desayuno con cafecito. Y en el Trece... Bueno... Es muy fome, digo... Martin Cárcamo... Really? Lucho Jara es más gracioso y eso que el tipo me desagrada. Y la Tonka, bueno, está linda y buena, pero... Mi perro estornudando tiene más gracia. Así que veo el matinal más facho de la televisión abierta e intento ignorar eso, porque la sección de cocina es más innovadora que los otros canales y siempre muestran algún emprendedor nuevo y caro con productos ricos que algún día probaré, tienen al doctor chino que siempre molesta al Lucho y... Bueno, no hay mucho que decir, digo, es un matinal... Y hoy, cuando encendí la tele, estaban en el Mucho Gusto haciendo un resumen de lo que fue la Teletón, sus impresiones, lo contentos que estaban y bla, bla, bla... Y no, no hablaré de la Teletón, lo trucha que es la campaña mediática, el trasfondo económico que significa, cómo engañan a la gente para hacerle creer que dona y aporta a través de las marcas asociadas a la fundación, porque eso ya lo hice y me llovió arena infinita con el único argumento que he escuchado/leído hasta el momento, carente de todo sustento que no sea el emocional: "No importa cómo se consigan los recursos, la Teletón hace una excelente y linda labor". Así que sigamos justificando el statu quo porque se hacen obras de caridad, total..

Estaban sacando conclusiones en el matinal, cuando apareció en ¿subtítulos? que el programa había tenido una entrevista exclusiva con Miguel Bosé. Y yo había terminado de desayunar, lista para ponerme a estudiar, pero era Miguel Bosé, así que me senté de nuevo y esperé la dichosa entrevista, que fue muy fome, pero me enteré que viene en marzo y me prostituiré para verlo (?). No sé si es la edad, pero ya no me gustan tanto los conciertos, no termino de disfrutarlos. Pero a Bosé no lo he visto nunca y siempre me ha encantado, quizá haga una excepción por él y contribuya a sus campañas mediáticas y a su abultado bolsillo. Cuando le preguntaron qué significaba para él participar en Teletón, casi me convence de creerles el show que arman para juntar plata. Casi.

Ahora, todos se preguntarán por qué mierda empecé hablando de Miguel Bosé, los matinales, criticando a la Teletón brevemente, y por qué nada de esto tiene mucho sentido, como si fuera una mescolanza de opiniones sobre diferentes cosas sin sentido aparente. Hice, precisamente, esta introducción que no tiene nada que ver con el tema central, porque me encanta Miguel Bosé. Y porque lo vi cantar en la Teletón y lo amé de nuevo, una vez más. Y me puse a cantar Morenamia con pasión, porque es una de esas canciones sensuales que tienes que cantar desde dentro, moviéndote y dejándote llevar por el ritmo, sobre todo cuando toca la parte del ♪ Que nadie como tú me sabe hacer... Uff... café ♪ Ay, Dios mío... Te hago todo el café que quieras... Y me acordé de eso cuando estaba viendo la entrevista, de lo que proyecta este sujeto y como se le mojan los calzones a todas.

Sí, era flacuchento, chascón y desabrido cuando joven. Sí, después empezó a ponerse pelado, le salió guata, pero esa barba lo hacía ver muy sensual. Sí, ahora está aún más gordo y aún más pelado. Pero sigue conquistando corazones, calzones y adolescentes. A mi hermana, por ejemplo. La vieran cantar y bailar Don Diablo. Es que cuando alguien mira a Ricky Martin o a Chayanne, incluso a Ricardo Arjona, los miras y tienen sus músculos, ese físico que saca suspiros y otras cosas, que hace que algunas féminas les lancen los sostenes, son encachados, tiran pinta, los maridos se ponen celosos y dicen "Qué tiene él que no tenga yo", las señoras, adolescentes, tercera edad, todas se derriten. Y es entendible, muy lógico. Yo me desmayo si Chayanne me mira con su sonrisa entre inocente y coqueta/tímida. Saben a qué me refiero.

Pero, ¿qué tiene Miguel Bosé? La respuesta es nada. No tiene un cuerpazo, es fofo, no tiene pelo, le sobra ponchera, es talla XXL según vi en la Teletón, es delicadito... Pero tiene su qué, eso que no sabes explicar pero que te engancha igual, esa sensualidad distinta, que no depende de una cuestión física. Tiene un atractivo muy característico, que comparten otros artistas, como Johnny Deep, que también tiene eso que no sabes por qué te gusta, esa cosa casi misteriosa, oculta, más sensual que los mejores pectorales del mundo. No sé describirlo y mucho menos explicarlo cuando me han preguntado qué brillo tienen tipos como Bosé y Deep, que no son encachados pero arrastran más minas que Hugh Hefner en la Mansión Playboy. Es como cuando encuentro rico a un tipo muy ñoño, sin mucho llobri, o a una mina que otras personas encuentran lindas, yo las hallo genéricas. Mi hermana me entiende, en eso nos parecemos xD Créditos por la palabra genérica. 

Es que a veces la sensualidad no va de la mano de un buen físico, de unos oblicuos de infarto o de los pectorales del negro de Old Spice (¿a alguien más le perturba que los mueva?). Tipos como Bosé pareciera que te conquistan las neuronas y, por añadidura, las hormonas. Es  la pose que tienen, lo que transmiten lo que los hace más galanes que un feo promedio (?), esa sensación de que pueden ser sensuales y sexuales a la vez, que en la noche pueden mostrarte el universo y hacerte desayuno en la mañana, hablarte de arte, política, la inmortalidad del cangrejo, el hambre en África y de las marraquetas, como si nada. Son versátiles, sutiles, inteligentes, elegantes, como que te enamoran. Son sensuales primero y sexuales después. Además Miguel Bosé canta. Y en español de España. Con ese siseo que le suma +10 en sensualidad. 

¿Alguien ha visto el vídeo de Morenamia? Es la hueá más sensual del mundo (?). No, mentira, pero es muy sutil en lo erótico y, mezclado con la canción, es un todo que a las minas nos gusta. Esa cosa de ser erótico, sutil, suave. Y después, ¡shuum pa'entro! Bueno, bueno, no se pongan colorados, si es cierto. En resumidas cuentas, no sabemos por qué a veces nos gustan los machos que no son tan machos ni especialmente masculinos según los cánones sociales establecidos, pero están ahí y nos gustan. Quizá porque dicen palabras bonitas y a las mujeres nos gusta un poco de eso. Y también de lo otro. Todo en su justa medida. Quizá porque esos hombres interesantes gustan mucho, traen sorpresas. Quizá porque lo típico es el macho alfa espartano de pelo en pesho y algo que se salga de eso llama más la atención. Quizá porque, sí, a veces quieres al pelao de Brazzers en la cama, pero el resto del tiempo quieres a un Bosé también, que te haga nanai, que sea más sensual que porno. Una mezcla de los dos no estaría mal, ¿no? Digo, en cosa de gustos...

Iba a terminar esta entrada con un comentario más subido de tono por un comentario que me hicieron el otro día, pero luego recordé que mi familia lee esto, que saben quien soy y que después la persona que me hizo el comentario se va a sentir ofendida y se me le va a enojarseme. Así que me iré a seguir estudiando y a llorar por todo lo que tengo que leer. Mientras bailo~


♪♪ Y por mi parte
Sobra el arte, lo que me das.
Dámelo, dámelo bien
Un poco aquí y un poco ¿a quién?

Cuando tu boca
Me toca, me pone y me provoca
Me muerde y me destroza
Toda siempre es poca
Y muévete bien
Que nadie como tú me sabe hacer... Uff... café ♪♪



10-4, mis queridos y no asiduos lectores de este disfuncional blog ♥~

jueves, 19 de noviembre de 2015

De Vacas y Otros Menesteres

Hace más de una semana que no me paso por acá y ya estaba pensando en no hacerlo hoy y dejarlo para cuando tuviera tiempo. Ya saben, en plan "Hoy tengo demasiadas cosas que hacer, lo dejaré para más tarde". Y, al fina, ese más tarde no llega nunca y aplazas eternamente lo que tenías que hacer. Esto tiene un poco que ver con la última categoría de engrupimiento nivel Dios que definí en la entrada anterior, pero sin querer queriendo. Es simplemente que no hallé tiempo durante la semana para poder escribir un poco y tampoco tenía ideas, me dije. Así que escribiré justamente sobre eso. No, no sobre no tener ideas, sino sobre cómo nos justificamos infinitamente cuando simplemente no queremos hacer algo. Porque buscar excusas es fácil, muy fácil...

Usualmente, me gusta escribir en plan chistoso, divertido, dicharachero, como dicen. Pero hoy estoy algo más nostálgica que de costumbre, medio sensible si se quiere. Quizá es porque estoy menstruando. Sí, estoy menstruando y lo acabo de publicar en una red social, ¿algún problema? Ok, eso fue un poco agresivo xD Me comportaré como cualquier mujer promedio (sin ofender) y culparé a la regla de todos mis males, del hambre en África y de mi vida en general. Además, estoy con una jaqueca de los mil demonios y no ayuda.

Ahora sí, a lo que vine: hacer que mientras usted lee esto se sienta miserable y conformista, lleno de vacas en su vida. Tantas, tantas vacas que podría tener un rebaño entero y usarlo para comercializar. ¿Por qué hablo de vacas? Bueno, hace un tiempo me prestaron un pdf con el título "La Vaca", así bien sencillito. Aquí está el link por si, después de leer esto y odiarme o darme las gracias, quiere saber más sobre el asunto.

Resulta que a veces vamos por la vida diciendo que no tenemos tiempo para compartir con la familia, la pareja, el perro, con nosotros mismos. Para hacer cosas sencillas como perder el tiempo escribiendo en un blog, dormir la siesta, viajar por el mundo o dejar de tenerle miedo a las arañas. Básicamente, nos justificamos con que así estamos bien, porque podríamos estar peor y, al final, las cosas no están tan mal. Así que seguimos el mismo camino que siempre hemos seguido, con una suerte de conformismo no asumido, porque nadie quiere que te apunten con el dedo y te digan "Eres un conformista de mierda y, si sigues así, se te va a pasar la vida sin hacer nada". Al menos a mí no me gustaría que me lo dijeran en la cara, mínimo que sea en privado y me alimenten primero para aplacar a la bestia (?). Justamente, este texto habla sobre el conformismo en el que nos acostumbramos a vivir a diario y que termina volviéndose nuestra realidad. Es como cuando dices tanto una mentira que al final terminas creyéndotela.

El libro empieza con el autor contando sobre cómo se enteró del cuento de la vaca y por qué quiere compartirlo con el mundo, en plan Paulo Coelho, pero directo a la vena, sin metáforas e historias extrañas donde te buscas a ti mismo y tu esposa te espera al final de la travesía con una espada. Sí, odio a Paulo Coelho, pero lo he leído para poder opinar. Y porque me regalaron unos libros, que reafirmaron mi postura al respecto. Pero, si usted está enamorado o le gusta alguien y cree que es el amor de su vida o, al menos, el amor de su vida en este momento de su vida, regálele "Brida", es una historia muy linda sobre las almas gemelas y por qué a veces podríamos querer a más de una persona a la vez. No, no justifica su calentura, si eso pensó. Ahora, si a su pareja no le gusta leer, déjela. Nadie merece vivir sin amar al menos un libro en su vida. Igual, no venía a hablar de ese libro. Otro día haré reseñas sobre mis libros favoritos. Un día en el que no tenga nada interesante para escribir, como hoy.

La historia de la vaca es una enseñanza de un maestro a su discípulo y empieza como cualquier enseñanza en plan Karate Kid: el maestro se lleva al discípulo a un viaje por la pobreza de los campos de algún lugar donde los campos y la gente eran muy pobres. Ambos llegan a una casucha pobre, pero no pobre, sino paaaaaaaaaabre, así como la Botota cuando era cabro chico. Al estilo mediaguas de campamento, me imagino yo, pero sin antena de Direct TV en el techo. En esta casita vivían 8 personas y solo sobrevivían con la leche que les daba la vaca, una vaca flaca como perra callejera vieja después de parir. Figúrese usted, así de flaca. Pero, a pesar de lo escuálida que era la vaca, la familia paaaaaabre de esta casuchita era envidiada por sus vecinos (ya saben eso de el pasto del vecino siempre parece más verde) porque ellos eran aún más paaaaabres y no tenían ni siquiera una miserable vaca, aunque estuviera escuálida y diera leche en polvo (?). Maestro y aprendiz se alojaron con esta familia una noche y partieron en silencio después. Aquí viene el PERO y la enseñanza. Pero antes de partir, en el más silencioso silencio, el maestro tomó a la vaca y la tajeó oee! El discípulo estaba en shock porque su maestro, que parecía tan sabio, había eliminado el único sustento que esa pobre y casi indigente familia había tenido. La cuestión es que el viejo no le dio ninguna explicación a su aprendiz y se largaron antes que el dueño de casa cachara que se habían echado a su vaca. 

Pasado un año, el maestro le dijo a su discípulo que volverían a visitar a la paaaaabre familia con la que habían estado, pero no encontraron la casa con la que se habían topado la última vez, sino que vieron una casa más decentita, de esas con porche, tal vez, pintura en damasco y ventanas con cortinas lindas. Y, para sorpresa del aprendiz, que obviamente no cachaba ná de la vida hasta entonces porque era pollo, el hombre que abrió la puerta era el mismo que los había recibido antes, pero tenía ropa limpia y olía a higienizado. El tipo les explicó que alguien se había echado a su vaca (algún vecino envidioso de su progreso, seguramente) y que la familia había estado a punto de morir, pero que lograron salir adelante porque no podían morirse de hambre simplemente porque la vaca se les había muerto, así que buscaron otras fuentes de sustento y se hicieron prósperos granjeros. Todo gracias a la vaca muerta, que los libró de la miseria y los llevó a la gloria que jamás habrían conocido si la vaca siguiera con vida.

La moraleja es que, al igual que la familia de la historia, a veces nos conformamos con lo que tenemos porque creemos que podríamos estar peor aún. Y nos aferramos a vacas metafóricas que nos impiden avanzar en la realización de nuestros sueños, o lo que sea. Pero, si logramos deshacernos de nuestras vacas, podremos ver que hay mucho más de lo que creemos, de lo que vemos o percibimos como estar bien

El texto define las excusas, en general, como las vacas más frecuentes, pero también puede ser un pensamiento irracional que nos paraliza y no nos deja actuar. Como cuando veo una araña y siento que se me suelta el esfínter, se me aflojan las piernas, me sudan las manos y quiero desmayarme, todo al mismo tiempo. Bueno, en eso pensé yo cuando leí esa parte. También están las justificaciones, que son vacas disfrazadas, según el autor, que son explicaciones para, y voy a redundar, justificar el por qué de estar como estamos. En resumen, todo es para eludir nuestra responsabilidad frente a las cosas que hacemos, o dejamos de hacer, a pesar de que siempre ha estado todo bajo nuestro control. Pero somos expertos en culpar a los demás.

Así que deje de excusarse y haga las hueás, no lo piense tanto, viva más, carpe diem, así es la vida, juegue, ríase, duerma, saque a los brocacochis a la plaza, cómprese una moto y salga a recorrer la carretera, hágale una fiesta sorpresa al perro para su cumpleaños perruno si quiere, métase a clases de yoga o zumba, baje de peso, busque otro trabajo si el que tiene no le gusta, aprenda alemán, deje las penas saladas y ponga más azúuuuuucar, como Celia Cruz, juegue Kino aunque no se lo gane, vaya al bingo fome que organizaron en su barrio, converse con los vecinos, hágase presidente de la directiva del curso de su hijo, aprenda a bailar salsa, escale el Everest, sepárese o cásese (según sea el caso), salte en bungee, haga rafting, coma dentro del supermercado y después no lo pague, deje de usar ropa interior (ojalá pudiera dejar los sostenes), rápese... Pero, por favor, deje de excusarse con que el tiempo, el nivel del mar, la alineación de los planetas, la dirección del viento, su miedo a esto, el temor a aquello, etcétera. Creo que la metáfora y la enseñanza quedaron más que claras.

Al menos yo, me deshice de una vaca escribiendo hoy. Pero tengo que estudiar más que la mierda, así que me quedan muchas vacas aún. Por ejemplo, Evaluación de Proyectos. Y culparé directamente a mi jefe de carrera, que tardó 3 semanas en inscribirme el ramo y me atrasó eternamente para poder ponerme al día. Es más fácil culparlo a él porque es un burócrata de mierda, en vez de asumir que no conozco a nadie en el curso y no sabía a quién hablarle porque soy tímida para conseguir un cuaderno decente y poder estudiar. Pero ahora se me juntaron las pruebas de los 5 ramos y estoy hasta las pelotas con materia que leer, ejercicios matemáticos que no sé hacer, con menos de 5 horas diarias de sueño, clases de natación 4 días a la semana, clases de flamenco, un perro que sacar a pasear, una abuela a la que no he visitado hace mucho tiempo (mami, te amo), y una cama a la que no le he cambiado las sábanas no me acuerdo desde cuándo.

Estúpidas lecturas que te carcomen la mente y te hacen pensar en lo basura que eres a veces... ¡Te odio, Paulo Coelho!



10-4, mis queridos y no asiduos lectores de este disfuncional blog ♥~




martes, 10 de noviembre de 2015

Engrupir

¿Qué es engrupir? Meter tollo. Máh ná te digo oeee!! Pero no cualquiera puede engrupir, es algo con lo que se nace. Y ese don se respeta.

Apuesto que, cuando leyeron engrupir, lo primero que pensaron fue en engrupir a alguien en plan conquista. Pero ese es uno solo de los tipos de engrupida que te pegas en la vida. Unos lo hacen mejor que otros, eso está claro. Los hombres suelen tener que engrupir más que las mujeres, así que hablaremos de ellos primero. Está el perrito-zorrón-papá, no necesariamente cuico. Recordemos que ser zorrón es cuestión de actitud. Esta especie se caracteriza por decir cosas lindas, al estilo de "qué hace una chica como tú en un lugar como éste" aunque ese lugar sea una fila en el banco, una plaza o el funeral de tu tatarabuela. También están, al otro lado de la vereda, los que no saben engrupir y es justo su torpeza lo que termina engrupiéndote, esa mezcla de timidez y ahueonamiento que tú quieres conocer. Y los término medio, que lo intentan hasta que te engrupen. Esos te ganan por cansancio y a veces traen gratas sorpresas. En la esquina femenina están las mijitas ricas a las que tienes que engrupir con magíster. Usualmente, ellas no necesitan engrupir, porque saben que son ricas y les llueven los pretendientes, los que las pasan a buscar para ir al carrete, o qué sé yo. Serían el símil de los zorrones y a veces se fusionan. De este lado también están las que no saben engrupir, que terminan muchas veces friendzoneadas porque no supieron conquistar a su gatito (me pasó), pero no les resulta como a los hombres, así que se quedan sin conquista. Y están las que también son término medio, que no son ricas ni demasiado feas, así que me incluyo en este grupo. Somos las que sabemos que no estamos demasiado ricas, pero somos inteligentes, así que por ahí va la cosa, metemos cuento, conversamos, somos las simpáticas, que te hacen reír y al final igual te conquistan. Puta, acabo de revelar mi secreto (?). Hablando de engrupir para conquistar, en mi reproductor de música está sonando justo en este preciso momento Be My Lover, de La Bouche:


I must confess 
Girl, yes, I wanna be your lover 
Take a chance, my love is like no other 
On the dancefloor getting down 
Hold tight, I'll never let you down 

A ha ye heyee wanna be my lover 
A ha ye heyee wanna be my lover 

Qué temazo.... En fin, prosigamos.

Engrupir para conquistar era solo una de las categorías. También, y siempre menospreciada, está la engrupida académica, esa con la que te salvaste en la prueba de filosofía o cualquier materia/ramo que sea de mucha lectura y no requiera tanta precisión como matemáticas. Ahí estás cagado. Aunque igual se puede meter tollo. Una vez lo hice en una prueba de física de la que no tenía carajo idea, así que inventé, en una de esas le achuntaba. Y la profe me dio puntito por el esfuerzo. Igual me saqué un rojo, así que el tollo no sirvió. Pero hay ramos, no física, que le permiten a uno, que tiene el don de la palabra (escrita, porque eso de socializar en persona se me da algo mal), explayarse, desenvolverse, hacer uso de todas las artimañas y tecnicismos aprendidos a lo largo de cinco años de universidad, de cada palabra extraña que a veces ni conoces, pero suena linda, y te lanzas a morir no más, igual que Américo. Eso hice en el control de hoy. Luego les cuento cómo me fue y si la engrupida resultó. Espero que sí, no quiero que la profe me siga contando durante otro semestre del mismo viaje a Francia en el que descubrió con sus propios ojos lo tercermundistas y subdesarrollados que somos. Profe, ya lo sabemos. Gracias.

Otro tipo de tollo es el que le metes a tus progenitores cuando quieres conseguir algo o salir por ahí. Usualmente, es una herramienta utilizada constantemente por los adolescentes. Un saludo a mi hermana, que jura que nos hace hueones xD Te amo, enana. Así, consiguen permiso para ir donde la Esta y se van a la casa del Este. Yo nunca hice eso, porque mi interacción con especímenes masculinos en la adolescencia fue bastante escasa. Así que, efectivamente, me iba a la casa de la Esta, que siempre nos alojaba, y tomábamos como poseídas. Tecito con sabor y hierbas, obviamente. Es que son super ricas. A veces tomábamos tanto té que había que ir al baño a evacuar. Una vez encontré a dos de mis amigas tomando tecito en la tina y cantando esa canción de Piratas del Caribe en que Jack Sparrow está en un bote y todos brindan, yoho! Lo que hace el té... El recurso de utilizar a tus amigos es muy típico y a veces tus padres igual te compran, pero la mayor parte del tiempo hacen como que te creen y te dicen que sí solo para deshacerse de ti y poder meter bulla en la casa (?).

También está el chamullo a los amigos y/o a la pareja. A los amigos a veces les dices que no podrás salir con ellos porque estás cansado, lleno de pruebas, agobiado por la existencialidad de los cangrejos y el hambre en África, porque no quieres decirles que vas a salir con el/la pololi para que no te hueveen de por vida con cosas como que los dejaste botados, que cambiaste, que ya ni apañas a las chelas, etc. A la pareja le dices que te vas a la casa de la Esta o del Este a estudiar, o algo muy piola porque estás cansado, lleno de pruebas, agobiado por la existencialidad de los cangrejos y el hambre en África, cuando en realidad estás en el puente de Mapocho en Bellavista gritándole al edificio de la Telefónica que alguien te cagó la vida, después de haberte juntado a chelear con los amigos y a tomarse algo piola si eres fémina. Si usaste la bici rosada con canasto de tu hermana chica, estás aún más cagado. Por cierto, ¿alguien más cachó que Ariel Levi está terrible rico ahora?. Digo, si hubiera estado así en Promedio Rojo, demás se come a la compañera española. Pero no habría existido película. Y nosotros no tendríamos con quién identificarnos en las miserias de nuestras vidas.

Por último, está el cuento que te creas a ti mismo cuando te mandan a hacer algo que no quieres hacer, o tienes que hacer algo que ya no puedes aplazar más, como cortarte el pelo porque ya te gritan Rapunzel en la calle, o estudiar. Siempre hay algo más importante, te dices, como ir a comprar pan, arreglar el cierre de un polerón que ya no usas o sacudir tu pieza y terminar haciendo aseo general en toda la casa. Procrastinación, ¿quién te conoce? Este tollo es el más cuático, porque sí, es difícil convencer a otras personas de esto o aquello, pero convencerte a ti mismo y ganarle a tu mente es supremo. Te autoconvences de que no tienes/ no puedes hacer lo que tienes que hacer cuando tienes que hacerlo y lo aplazas, lo aplazas, lo aplazas y lo aplazas... Hasta que te das cuenta que tienes dos pruebas, tres trabajos, tu perro parece mendigo, se te cayó el diente por la carie, tu pololi terminó contigo, ya no tienes amigos y y más encima te fue mal en la prueba en la que intentaste cuentearte a la profe con tu sabiduría postmoderna de universitario revolucionario al peo. Digo, a alguien le tiene que haber pasado alguna vez.

Por eso, no crea todo lo que le dicen, haga lo que tiene que hacer cuando tiene que hacerlo, respete para que lo respeten y edúquese lo más que pueda. Para no tener que engrupir a nadie.


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viernes, 6 de noviembre de 2015

De Abuelas y Otras Cosas

NOTA: Esta semana estuve estudiando y me pasé 12 horas diarias en la universidad, pero todo sea por no echarme más ramos y salir luego. En realidad, culpo al jefe de carrera, que se demoró tres semanas en querer inscribirme los malditos ramos y me quedé tres semanas atrasada en materia y controles. Si usted, señor jefe de carrera, llegara a leer esto por alguna divina razón, sepa que mi odio por usted quema con la intensidad de mil soles. Sepa también que todos extrañamos a la otra jefa, que te hacía estar un día entero haciendo fila para un número, pero entrabas a su oficina y te solucionaba todo el mismo día. Nada de burocracias de mierda y "mándeme un correo" que tarda una semana entera en ser respondido. Lo odio y por eso no he podido actualizar el blog. Fin del comunicado.



Ahora, lo que nos convoca. Dicen que en el mundo, madre hay una sola. Y abuelas también, porque ellas son madres, así que la regla también aplica. Chúpate esa, silogismo (?). En mi caso, tengo una abuela (madre de mi papá), una bisabuela (mamá de mi abuela materna) y una mami (mi abuela materna), que es como le decimos en la familia a nuestra matriarca. A mi abuela materna nunca le dije abuela, es más, a ella no le gusta que le digan así. Y como siempre escuché a mi madre y a mis tíos decirle Mami, así quedó.

Siempre dicen que las abuelas son las que te consienten en todo, porque ya criaron y ahora se dedican a malcriar a sus nietos. Excepto la mía, que me pegaba con la chancha de suela y me hacía zumbar el culo cuando me portaba mal. Mi Mami es de las abuelas que te crían, no de las que vas a visitar el fin de semana y te prepara tu comida favorita si no te ha gustado la comida de adultos. Mi Mami es de las abuelas que te cuidaban porque tu mamá tenía que ir a trabajar. Es de las que te enseñaron a ir al baño y te gritaban cuando te meabas. Es de las que te enseñaron a leer y te hicieron almuerzo cada noche para llevar al liceo. Es de las que a veces sientes que no quieres porque eres pequeño aún y no entiendes que todo lo que ella hace, lo hace por tu bien. Pero luego vas creciendo y todas esas cosas que te enseñó en el camino ahora son útiles. Como aprender a usar los mil cubiertos en una cena (el día de mi gala de IVº Medio por fin usé tales conocimientos). Bueno, nunca más fui a cenar a un lugar elegante, así que ya lo olvidé.

Mi Mami es de esas abuelas que te hacen papilla los porotos y las lentejas y ponen todo en un envase de Colados Nestlé para que tú creas, en tu infantil ingenuidad, que son colados de verdad. Porque eres mañosa y no comes cualquier cosa, o eso crees tú.

Recuerdo que una vez, como a los cinco años, yo estaba jugando a balancearme en el sillón de su casa, mientras me metía una brocheta de esas de maderita a la boca, solo porque quería morder algo. Mi Mami me dijo "Sal de ahí, que te vas a romper la boca". Obviamente, yo protesté porque, según yo, ella no sabía nada de diversión. Y yo lo estaba pasando cachilupi. Volvió a repetirme que dejara lo que estaba haciendo al menos unas tres veces más. Y después no dijo nada, porque el sillón se me dio vuelta y la brocheta me rajó el paladar hasta el esófago, más o menos. Luego de eso no recuerdo nada más. Mucho dolor, probablemente. A veces, en la familia, dicen que mi Mami es media bruja. Mi papá solía decir eso, quizá porque era la suegra. Es que ella siempre dice algo y ese algo pasa.

A mi Mami le encanta cantar y andar silbando por ahí. De hecho, lo hace muy bien. Cuando pequeña, envidiaba su manera de silbar, con los cachetes inflados y una melodía como la que silbaban las princesas en las películas de Disney. Y yo solo escupía mucho cuando lo intentaba. Pasan que cosas... Y esas imágenes, de ella cantando por ahí, son los primeros recuerdo que tengo de ella, flaca, con el pelo largo y el escobillón, entonando canciones de la Violeta Parra mientras hacía el aseo. Tanto era lo que cantaba, que yo juraba que ella era la mismísima Viola, porque era igualita. Si alguien ha visto fotos de mi Mami cuando era joven, podrá corroborar mi historia. Bueno, quizá por eso me gusta tanto la Violeta Parra, porque me recuerda a mi abuela cantando mientras me cuidaba. Y, hablando de música, en su casa fue que me enamoré también de Los Tres, cuando vi un vídeo en esas televisiones antiguas sobre muchos cigarros que iban a conocer el río, pero uno de ellos moría. Triste vídeo para una niña tan pequeña.

Hace unos tres años, le escribí una carta para su cumpleaños. Justo unos días después, alguna de sus hermanas le dijo algo así como "Si a ti tus nietas no te quieren, eres muy pesada y enojona", o algo así. Mi Mami sacó la carta que yo le había escrito y todos terminaron llorando por lo emotivo de la letra. Es que es cierto, mi Mami es muy enojona, grita bastante y a veces es pesada. Pero antes de todo eso, es nuestra abuela y nos ama incondicionalmente. Sé que si le dijera que hice lo más terrible que alguien se pudiera imaginar, ella me apoyaría de todas formas y estaría ahí para mí. Después de haberme tirado una chancla por la cabeza, seguramente. Pero estaría ahí y eso es lo que cuenta para mí.

Hay muchas cosas que quisiera agradecerle, pero no terminaría nunca. Una de esas cosas es que gracias a ella que estoy en la universidad. Siempre es la primera a quien le cuento que pasé un ramo, es la más contenta. Y también la más triste cuando he reprobado. Siempre está pendiente de todo y de todos. En serio, no sé cómo lo hace. Pero me ha llamado para despertarme y recordarme que tengo que ir a algún sitio, para retarme, para felicitarme por el cumpleaños y hasta para decirme que va en camino cuando estoy enferma. Incluso ahora, con 23 años y ella con 65, mi abuela sigue cuidándome. El año pasado, cuando me accidenté, fue cada mañana a darme almuerzo porque no podía ni limpiarme el trasero por mí misma. También me bañó varias veces durante ese tiempo y se preocupó por mí. Todo eso antes de irse a trabajar. Y yo en las mañanas a veces no alcanzo ni a tomar desayuno porque se me va el tiempo volando.

Si tuviera que señalar a alguien que me ha enseñado mucho en la vida, esa eres tú, sin duda alguna. Cosas tan triviales como sentarse correctamente a la mesa. Y cosas más esenciales, como no dar nunca nada por perdido, esforzarse por lo que se quiere y salir adelante a pesar de todas las cosas malas que te puedan pasar. Porque siempre puedes ser mejor si te lo propones. Por eso, de todas las personas a las que alguna vez he decepcionado, tú eres la más importante de todas. Cuando te fallo, no sabes cómo me duele.

A veces te miro y pienso en los años que tienes, por todo lo que has pasado y todo lo que haces por todos nosotros desde que cada uno llegó a tu vida. El almuerzo, los trajes de fiestas patrias, los chalecos y las bufandas, el estuche con mi nombre bordado que perdí junto a la mochila, las zapatillas para navidad, las idas al doctor. Aún recuerdo que siempre te preguntaban si eras mi madre. "Es que se ve tan joven", te decía el doctor. Es más, todavía te preguntan lo mismo.

Traté de hacer este post ligeramente gracioso, como el chiste de la foca que siempre cuentas, que es muy fome, por cierto. Pero es inevitable ponerse sentimental contigo cuando te dedico algo, pensar que algún día ya no estarás más y me dejarás un vacío enorme que sé que nada ni nadie va a llenar nunca. A veces conversamos con mi hermana sobre esto y siempre llegamos a la conclusión de que nos va a dar depresión.

Pero ¡alegría, alegría!, que hoy es tu cumpleaños y vamos a tirar la casa por la ventana. Nah, mentira, no tengo ni pa' cargar el pase.

Gracias por todo. Nada específico, en realidad, porque las palabras no alcanzan para dar cuenta de lo mucho que te amamos, para agradecer lo que has hecho y lo que sigues haciendo, para siquiera lograr que la gente entienda lo que significas en nuestras vidas.

Cuando me preguntan si tengo abuela, yo respondo que no. Porque yo tengo una Mami, que es mucho mejor. Y de ésa sí que hay una sola.

Feliz cumpleaños~

Te amo ♥


10-4, mis queridos y no asiduos lectores de este disfuncional blog ♥~